Durante mi reciente viaje a Delfiá, tuve la oportunidad de alojarme en el hotel Can Jenot. Quisiera resaltar dos aspectos positivos de mi estadía. En primer lugar, debo mencionar que mi elección de este hotel se debió principalmente a su ubicación conveniente. Estaba de paso en la ciudad, ya que me dirigía a otro destino, y este hotel se encontraba a tan solo 62 km del aeropuerto más cercano. Esto hizo que mi traslado fuera rápido y sin complicaciones.

El suelo de la ducha parecía tener moho, lo cual me resultó un tanto desagradable.

Estuve recientemente en Delfiá y mi estancia en Can Jenot fue bastante satisfactoria. En cuanto a las ventajas, destaco dos aspectos del hotel. En primer lugar, debo destacar que solo me alojé en este hotel de tránsito durante mi viaje, por lo que su ubicación resultó sumamente conveniente. Está ubicado a solo 62 km del aeropuerto más cercano, lo cual facilitó enormemente mi transporte. Además, las instalaciones del hotel eran cómodas y limpias, lo cual fue un factor importante para mí.

Por otro lado, en cuanto a los aspectos negativos, hay un detalle menor que me llamó la atención. Tuvimos que pagar 18 euros en tasas turísticas para cuatro personas, dos de ellas menores de 16 años.

Mi estancia en Can Jenot fue perfecta para un tránsito durante mi viaje. Además, la cercanía del aeropuerto a tan solo 62 km es muy conveniente. Fue fácil y rápido llegar al hotel después de mi vuelo, lo cual fue una gran ventaja.

Quizá lo único negativo que puedo mencionar es que el espacio en el hotel es limitado. La cocina, la sala y el dormitorio son un solo espacio, lo cual puede resultar un poco incómodo.

El lugar tiene un espacio hermoso con una piscina acogedora, perfecta para relajarse después de un día de trabajo. Además, cuenta con una terraza privada donde se puede disfrutar de un desayuno tranquilo. Los propietarios son muy amables y te hacen sentir como en casa. También ofrece facilidades como barbacoa comunitaria y estufa de leña para el invierno. Sin duda, es un lugar ideal para descansar y disfrutar de la tranquilidad.

El sofá-cama no es cómodo para dormir.

sitio tranquilo, dueños amables, espacio precioso con piscina grande y terraza privada. La casa está limpia y tiene todo lo necesario. Recibimiento bueno.

sofá-cama incómodo.

Un espacio precioso con una piscinita super agogedora, terraza para desayunar o comer fuera, tendedero, lavadora, utensilios de cocina.

Me sentí bastante a gusto, no tengo ninguna queja en absoluto.

La amabilidad del personal y la atención recibida durante mi estancia fueron excepcionales. Además, las instalaciones del hotel estaban limpias y bien mantenidas, lo cual fue muy agradable. había un amplio estacionamiento disponible, lo que hizo que mi visita fuera aún más conveniente. La ubicación del hotel era perfecta, ya que estaba cerca del transporte público y de varios puntos de interés en esta ciudad. Por último, el desayuno que se ofrecía era delicioso y satisfactorio.

Ninguna queja.